El arte de la subsistencia en Corea del Sur, particularmente en lo que refiere al sustento diario, revela un tapiz de precios que se balancean entre lo mundano y lo astronómico. El paisaje gastronómico coreano nos advierte que no se debe juzgar la accesibilidad pecuniaria del comestible por la opulencia de sus sabores o la colorida presentación en los mercados y restaurantes. Adentrándonos en los callejones donde el aroma del kimchi fermentado baila al compás del bulgogi, uno podría suponer…