Permítaseme llevaros en un periplo culinario a través del laberinto de la historia, donde descubriremos el linaje etimológico de una joya gastronómica: el waffle. Este término, que evoca en la mente imágenes de labrados comestibles dignos de un banquete matutino, tiene raíces tan intrincadas y fascinantes como los intrépidos senderos en un jardín botánico. Originario del antiguo léxico franco, fue en la lengua de los galos donde «wafel» empezó a tomar forma. ¿Sabíais que en aquellos tiempos medievales estos artesanos…