Sumérjase en la odisea culinaria de la salsa de pescado, una esencia venerada que despierta los mares en nuestro paladar. Preguntémonos, ¿acaso este néctar marino requiere el calor como compañero de baile, o es un libre espíritu, mejor disfrutado en su estado primigenio? En el lienzo de la gastronomía, la salsa de pescado es un toque impresionista: sutil pero transformador. El mito perpetuado por susurros entre fogones sugiere que su esencia se amplifica al ser sometida al carmín llameante. No…